La segunda jornada del festival de Sitges sigue marcada por la temática post apocalíptica que inició ayer Contagion. En la misma línea hemos podido ver de The divide de Xavier Gens y 4:44 Last day on Earth, la cinta de Abel Ferrara.
También hemos podido disfrutar del mejor cine oriental de la mano del poeta y director Sion Sono gracias a la fantástica Guilty of romance, una montaña rusa de colores que no va a dejar indiferente a nadie. Las comedias Kill me please y Lobos de Arga han completado un día lleno de buenas propuestas. En el pase de The divide se ha hecho entrega de la Máquina del tiempo a Michael Biehn, actor que se hizo famoso de la mano de James Cameron al trabajar a sus ordenes en Terminator, Abbys y Aliens: El regreso. También durante esta tarde ha habido un encuentro con Balagueró que ha recibido la Máquina del tiempo. La nota negativa de la jornada ha sido que Juan Antonio Bayona (El orfanato) ha cancelado el encuentro que tenía previsto para adelantar novedades de su nueva película, The impossible.
Mañana dos cineastas de lujo: Jaume Balagueró con Mientra duermes y Kim Ki-Duk con su documental Arirang.
Mañana dos cineastas de lujo: Jaume Balagueró con Mientra duermes y Kim Ki-Duk con su documental Arirang.
Valoración: 6/10
La nueva película de Abel Ferrara no prometía demasiado tras su reciente paso por la Mostra de Venecia y las críticas negativas que cosechó. Las irregularidades en su filmografía son conocidas de sobras desde hace mucho tiempo y era fácil esperarse cualquier cosa. A pesar de ello la cinta aprueba y da un giro interesante a su carrera. 4:44 last day on earth es una visión intimista del apocalipsis. Un actor y una artista vivirán sus últimas horas de vida en un loft de Nueva York antes de un anunciado fin del mundo a las 4:44 de la madrugada. Sin entrar en catastrofismos ni en grandes tragedias los protagonistas asumen su destino y se dedican a pulir los últimos detalles, como despedirse de familiares vía Skype o resolver algunas cuentas pendientes. Referencias al 11-S, al Dalai Lama o a los consejos ecológicos de Al Gore plasman la pérdida de valores de una sociedad fracasada. Una ausencia total de realismo que da lugar a la reflexión y al temor a afrontar la muerte.
Valoración: 9/10
Izumi, la esposa de un reputado escritor, nota un vacío en su vida debido a una vida rutinaria de ama de casa y la relación con su marido no tiene ningún tipo de pasión. Se propone hacer algo con su vida y buscar trabajo antes de los 30. En su búsqueda hacia una vía de escape, sin darse cuenta, se va a introducir en una espiral desenfrenada de sexo y degeneración. Sion Sono nos trae una bajada a los infiernos en toda regla donde el crimen y el sexo se mezclan alcanzando a ser la misma sensación. Una fotografía a base de neones y colores se añaden a la dirección perfecta de Sono. La etapas de Guilty of romance son varias y el thriller inicial se convierte en drama con pequeños momentos brillantes de humor negro. Una película muy sórdida con sexo a raudales y un abuso estético que seguramente dividirá a la audiencia. Guilty of romance no es apta para todas las sensibilidades y a lo largo del opresivo recorrido de sus protagonistas la angustia queda impregnada en el interior del espectador.
Kill me please
Valoración: 7/10
Enmarcada dentro del cine experimental, Kill me please se destapa como una comedia muy negra y como todo un acierto. Una clínica médica en medio del bosque se dedica a realizar suicidios asistidos a sus pacientes para evitar muertes violentas innecesarias. Así al inicio podemos observar tanto a los perturbados y depresivos clientes como sus últimas voluntades. El problema llega cuando un incendio en las instalaciones provoca un retraso en la rutina habitual de la clínica, un retraso que algunos pacientes que tienen prisa por morir no están dispuestos a consentir. Kill me please es una de las cintas más curiosas que hemos podido ver hasta el momento en el festival y ha sido toda una revelación. Con un inicio muy descriptivo la cinta nos muestra el funcionamiento de la clínica en un tono más serio para más tarde dar lugar a la más absoluta locura colectiva. Filmada en un estupendo blanco y negro, esta parodia no se corta a la hora de denunciar la hipocresía moral por parte de muchos gobiernos. Todo un descubrimiento.
The divide
Valoración 7/10
La ciudad de Nueva York sufre un repentino ataque provocado por bombas nucleares y un pequeño grupo de vecinos se refugia en el sótano de su edificio. El encargado de mantenimiento del bloque, un exbombero paranoico, víctima de los atentados de las torres gemelas, tiene un búnker con alimentos y bebida suficientes para sobrevivir los días que dure la lluvia radiactiva. Con el paso del tiempo y una amenaza desconocida que proviene del exterior empezaran los problemas de convivencia entre el grupo de supervivientes.
Xavier Gens, de quien ya pudimos disfrutar su ópera prima Frontière(s) en una edición anterior del Festival, vuelve a Sitges con su segunda aventura internacional. En esta ocasión, el holocausto nuclear sirve de punto de partida para abordar temas filosóficos de carácter social y moral. Cuando los supervivientes empiezan a tener escasez de provisiones sale lo mejor y lo peor de cada uno, extremando sus personalidades y sus posibilidades. Este problema junto con el drama de haber perdido la vida cotidiana y la paranoia por los efectos de la radiactividad los trastornará hasta límites insospechados, dando una vuelta de tuerca a la idea de que el hombre es un lobo para el hombre. The divide, que tiene similitudes con la magnífica The road, cuenta con una fotografía espectacular y unas interpretaciones muy solventes. La película tiene un inicio brillante, un punto intermedio un tanto flojo y un final trepidante lleno de angustia que le da justo lo que necesita la cinta. Una propuesta más que interesante sobre la mutación de las relaciones interpersonales en un escenario post-nuclear.
Lobos de Arga
Valoración 5/10
Juan Martínez Moreno nos trae una cinta de hombres lobos en clave de comedia. Un escritor fracasado vuelve al pueblo donde creció para ser nombrado hijo predilecto. Lo que no sabe es que en realidad los aldeanos quieren matarlo para acabar con una maldición que asola al pueblo desde hace 100 años y que tiene que ver con su familia.
Lobos de Arga es una comedia rural heredera de algunas cintas españolas de los 70 actualizada a nuestros días. Su mayor baza es contar con uno de los humoristas del momento, Carlos Areces, lo mejor de la película. Junto a él encontramos un reparto bastante justo entre los que destaca Manuel Manquiña, más por motivos históricos que por su papel en la película. Una comedia bastante terrorífica, en el peor sentido del término, con un par de momentos muy divertidos pero con un guión muy flojo lleno de chistes de patio de colegio.
Pues bastante de acuerdo en Lobos de Arga, le hubiese puesto más nota a The divide y menos a Guilty, pero me parece una buena crónica y puntuaciones más que justificadas. Un abrazo.
ResponderEliminarGuilty of love me fascinó, pero reconozco que no es una película para todos los públicos, una bajada a los infiernos tremenda. Un abrazo!
ResponderEliminarDe Lobos de Arga poco se podía esperar. Cómo le dije a David me interesa mucho mucho (y no se por qué) Guilty of Romance.
ResponderEliminarLa película de Ferrara ya estuvo en Venecia y se llevó palos, aunque no tantos cómo cabría esperar. Ayer por cierto vi Melancholia, película con la que guarda cierto paralelismo.
Un abrazo chicos!
Emilio, Me fascinó Guilty of Romance, es una cinta que ha creado división y lo entiendo, es bastante fuerte. También había leído críticas muy malas de la de Abel Ferrara, a mi me gustó, esa vision pausada y intimista del fin del mundo la encontré hipnótica.
ResponderEliminarPuff, le tengo unas ganas a Melancholia!
Un abrazo!