DocsBarcelona 2012: Inauguración y primer dia

El pasado miércoles pudimos asistir a la inauguración de DocsBarcelona en el Petit Palau de la Música Catalana con la proyección de la película iThemba. Estuvimos presentes gracias a la invitación del amigo David Amorós que también está disfrutando del festival estos días.

El jueves empezó la programación para el público y pudimos disfrutar de There once was an island y de La nuit, elles dansent, dos propuestas que muestran realidades muy distintas y muy lejanas. Os dejamos con las reseñas de las tres películas, de las cuales destacamos iThemba, la película inaugural, por su calidad y su sentido del humor ante las adversidades de la vida. Recordad que durante todo este fin de semana Barcelona se convierte en la capital del cine documental y podéis disfrutar toda la programación en distintos horarios.

iThemba (Hope) de Elinor Burkett & Errol Webber, 2010

La película de inauguración del DocsBarcelona ha sido iThemba, la historia de un grupo de jóvenes discapacitados que luchan por sobrevivir en Zimbabwe a través de su pasión, la música. Los chicos de Liyana (el nombre de su grupo de música) nos dan una auténtica lección a través de su sentido del humor y de su persistencia demostrando que a pesar de estar en una situación terriblemente adversa los sueños se pueden alcanzar. En Zimbabwe ser discapacitado conlleva una fuerte marginación y rechazo social. Estamos ante un país que no cubre ni de lejos las necesidades primarias de sus habitantes, afligido por una galopante inflación que arrastra al país a una situación insostenible.

Elinor Burkett, directora de iThemba

Elinor Burkett y Errol Webber dirigen este admirable testimonio en clave esperanzadora y optimista. Burkett, de la cual hemos disfrutado de su presencia durante la proyección, ganó en 2010 el Oscar a mejor cortometraje documental por Music by Prudence, una versión de la película que nos presenta ahora en la que descubrimos a Prundence y su música como una de las protagonistas. Para estos tiempos difíciles de crisis, DocsBarcelona ha decidido dar el pistoletazo de salida con una visión constructiva del poder de la voluntad en un país al límite de la ruptura.

There Once Was An Island de Briar March, 2010

Los habitantes de la isla de Takuu en  Papua Nueva Guinea tienen que enfrentarse a una solemne decisión respecto a su posible emigración de la isla debido al crecimiento del nivel del mar causado a su vez por el cambio climático. La altitud de Takuu es de apenas un metro. El calentamiento global y la constante subida del nivel del mar hace que los temporales sean cada vez más duros para esta comunidad de orígenes ancestrales.

There once was an Island nos acerca a esos habitantes que vive al margen de la tecnología en casas creadas con sus propias manos sin prácticamente conocer lo que es el dinero. Dos científicos llegarán a la isla para investigar el estado real y para poner al corriente de la situación a sus habitantes. Estamos ante un documental clave para entender los efectos de la contaminación en muchas de las islas del pacífico, todas ellas de países en fase de desarrollo, que acaban pagando por las emisiones de un primer mundo indiferente al cambio climático. La película también ofrece escenas espectaculares, como la de una de las subidas de la marea, hecho que empieza a ser muy frecuente en la casi desparecida isla.

La nuit, elles dansent (At night, they dance)de Isabelle Lavigne & Stéphane Thibault, 2010

Más cercana al cinéma vérité que a un documental clásico, At night, they dance, nos presenta un matriarcado en El Cairo formado por una ex bailarina y sus tres hijas. La madre había sido una gran estrella de la danza del vientre y ahora que está retirada y embarazada se dedica a gestionar las actuaciones de sus tres hijas a las que ella misma formó en una tradición que se remonta a varias generaciones. El documental nos muestra el mundo de las bailarinas de la danza desde su interior, mostrando como por la noche están muy solicitadas y lo mal vistas que resultan durante el día en una sociedad machista que prohíbe que sus mujeres muestren el más mínimo de sus encantos.

Las dos directoras fueron al El Cairo con la intención de rodar este documental, pero no conseguían encontrar a los personajes adecuados. Cuando estaban a punto de darse por vencidas encontraron a la matriarca protagonista y no podían haber hecho una mejor elección ya que se trata de un personaje extrovertido y divertido, que gobierna su casa con mano de hierro y bastantes triquiñuelas. El gran acierto del documental es captar la rutina de la familia como si se tratase de una película de ficción, ya que sus personajes parecen olvidarse que están siendo grabados en todo momento. Sin el menor pudor asistimos a sus discusiones más íntimas e incluso a algunos secretos amorosos además de las típicas peleas familiares. Esta virtud tiene dos caras y termina convirtiéndose en el gran defecto de la cinta ya llega a hacerse algo monótona y repetitiva en algunos momentos.