Venezia 2012: Orizzonti (2/2)

Todo preparado para la entrega de premios de la Sección Oficial de la Mostra de Venezia que se realizará esta tarde a las 19h. Todas las miradas de la crítica se han posado sobre la cinta The master de Paul Thomas Anderson aunque también parten como favoritas Bella addormentata de Marco Bellocchio, Après Mai de Olivier Assayas, Thy womb de Brillante Mendoza o Pieta de Kim Ki-Duk. Esta tarde el desenlace.

Mientras nosotros hemos escrito la segunda entrega de la crónica online de la sección Orizzonti, destacando un descarnado drama ambientado en las áridas colinas de Algeria, Yema, y la comedia negra y surrealista rusa, Me too. Sólo nos queda esperar el Palmarés de esta tarde y el deseo de que la organización decida repetir el año que viene esta inciativa para vivir el festival desde casa por streaming, una gran experiencia.

The cutoff man 
Valoración: 6/10

Seguimos con más visiones de la crisis en la sección Orizzonti, en esta ocasión nos vamos a Israel. The cutoff man nos presenta a Gabi, un desempleado que encuentra trabajo temporal en la compañía del agua dedicándose a cortarle el suministro a todos los que no pagan sus facturas. La nueva profesión de Gabi está muy mal vista. Aunque no le queda más remedio, si quiere sacar adelante a su familia tendrá que afrontar los insultos, las agresiones y los conflictos que ya empiezan a formar parte de su rutina habitual. El mayor de sus problemas se presenta el día en que tiene que cortarle el suministro al entrenador de su hijo cuyo mayor sueño es dedicarse al fútbol profesionalmente.

Estamos ante una película breve (76 minutos) que nos muestra una de las zonas más humildes de Israel, donde muchos de sus habitantes no pueden permitirse el suministro de agua. La película viene a ser una lectura pesimista de la escasez de medios que asfixia cualquier síntoma de prosperidad. Aunque estamos ante un drama solvente, es inevitable pensar que a pesar de su brevedad The cutoff man se hace un poco repetitiva en su pesimista mensaje.

L’intervallo 
Valoración: 6/10

Salvatore es un joven de 17 años que se encarga de vigilar a Verónica que está cautiva en un enorme edificio abandonado del barrio. Los dos se conocen de vista y Salvatore desconoce los motivos del encierro de Verónica. Vigilante sumiso y prisionera rebelde parten de una situación hostil e incómoda que acabará en una cariñosa relación de amistad. Leonardo Di Costanzo firma esta pequeña película en la que dos adolescentes extraños, víctimas de su situación, inventan un universo propio en las entrañas de un inmenso edifico en ruinas, el auténtico protagonista de la película. Una vez más estamos ante un drama de bajo presupuesto, breve y tan correcto como olvidable.

Yema (Mother) 
Valoración 8/10

Una mujer arrastra por el campo argelino el cuerpo sin vida de su hijo Tarek para enterrarlo en su casa. Al llegar aparece su otro hijo, Ali, un guerrilla jihad al que ella culpa de la muerte de su hijo militar. Para no verlo se encierra en su casa bajo la atenta mirada de un terrorista que ha quedado manco bajo las ordenes de Ali. La tensión entre madre, hijo y vigía pasa del dolor por la pérdida, a la tristeza, la comprensión y el cariño, siempre de forma creíble y natural mientras nos acerca a cuestiones importantes sobre la vida, la muerte, la venganza, el perdón, el amor o las creencias religiosas.

La directora argelina y actriz protagonista, Djamila Sahraoui, consigue una sobresaliente película con muy pocos elementos y un guión sin grandes diálogos, gracias al buen uso del lenguaje narrativo propio del cine y a unas interpretaciones solventes. Al igual que ¿Y ahora adonde vamos?, Yema es una película antibelicista sobre un país en guerra permanente que enfrenta a hermanos de sangre, pero a diferencia de la cinta de Nadine Labaki, aquí, el canto alegre se transforma en las amargas lágrimas de una madre que lo ha perdido todo y que a pesar de ello quiere seguir hacia adelante y luchará por conseguirlo.

Me too 
Valoración 8/10

La cinta de Alexey Balabanov podría ser una versión postnuclear y underground de El mago de Oz. En Me too, Dorothy, Totó, el león, el espantapájaros y el hombre de hojalata se transmutan en un músico en plena decadencia, un asesino, un alcohólico, una prostituta y un vidente que buscan desesperadamente la felicidad. En esta ocasión la felicidad no viene de un mago sino del "Campanario de la felicidad", la torre de una iglesia que tras un accidente nuclear te puede transportar a un planeta donde hay agua, vida y felicidad.

Una película surrealista solo apta para paladares atrevidos que combina accidentes nucleares, mayas, canciones extrañas, alcohol y nieve para ofrecernos una comedia negra, oscura y deseperada muy adecuada para estos tiempos de infelicidad global.