Año: 2002
País: Argentina
Dirección: Carlos Sorín
Guión: Pablo Solarz
Intérpretes: Javier Lombardo, Antonio Benedictis, Javiera Bravo
Fotografía: Hugo Colace
Música: Nicolás Sorín
Montaje: Mohamed Rajid
Valoración: 8/10
Este año, Carlos Sorín participará en la Sección Oficial del Festival de San Sebastián ni más ni menos que por quinta vez con su nuevo filme, Días de pesca. Desde su debut con La película del Rey, el escenario predilecto para sus trabajos cinematográficos siempre ha sido la Patagonia. Considerado por muchos como el más grande para las historias pequeñas, el argentino ha creado un estilo propio con el que ha trascendido a nivel internacional gracias a su sencillez y honestidad. Hoy vamos a hablar de Historias mínimas, su proyecto más triunfal hasta el momento que en 2002 se alzó con el Premio especial del jurado y con el FIPRESCI del Zinemaldia.
En los remotos parajes de la Patagonia se van a cruzar los destinos de tres solitarios personajes. Un anciano de ochenta años, dueño de un bar de carretera que regenta su hijo, se ha escapado de casa en busca de su perro desaparecido desde hace tiempo. Un comercial viajante de cuarenta años, lleva en su viejo coche una tarta de crema para el cumpleaños del hijo de la joven viuda de uno de sus clientes con la idea de impresionarla. El mismo día una joven de 25 años viaja con su hija en autobús siguiendo la misma ruta, acaba de saber que ha resultado ganadora en un sorteo de un programa de TV, cuyo premio mayor es un robot de cocina.
Las historias mínimas de Sorín gozan del encanto que ofrecen la simplicidad intachable de las pequeñas historias. Son historias cotidianas que giran en torno a las ilusiones, la bondad, las decepciones, la soledad y la sencillez. Sus personajes, todos ellos interpretados por actores no profesionales, ofrecen a la película la solvencia y ternura perfecta. Una excelente fotografía apoyada en los inmensos y solitarios parajes patagónicos completa la atmósfera ideal de esta entrañable road movie.
Historias mínimas es una demostración más de lo grande que puede ser una película con un presupuesto muy pequeño. Sorín ofrece una lección de humildad con talento, sentido del humor y buen gusto. Ganadora de múltiples premios en distintos festivales del mundo, la película se alzó con el Goya a la mejor película extranjera de habla hispana. Sólo nos queda esperar para ver que nos ofrece el realizador en San Sebastián con Días de pesca, ¿Puede que estemos hablando de la próxima Concha de Oro?
Lo mejor: Sus entrañables personajes
Lo peor: No deja de ser una película menor
La vi hace años y recuerdo que me había gustado basatante. Carlos Sorín tiene alguna cosa interesante y como bien dices, sabe hacer grandes cosas con economia de medios.
ResponderEliminarSaludos
Roy
Es cine con muy buen gusto y con pocos medios, aunque esos peazo paisajes patagónicos se podrían considerar un gran medio jaja Saludos!
EliminarUna sorpresa en su día. El nombre de Sorín empezó a sonar con fuerza entre los festivales y poco a poco se hizo un huequito. Como bien dices esa etiqueta de cine menor, que no por ello peor, le acompaña siempre y sus películas suelen ser más minoritarias.
ResponderEliminarEstas "Historias mínimas" lo resume todo. Para mí su mejor película, ya que fue precursora en la forma de contar sus historias.
Un tipo muy interesante.
Un abrazo.
Es uno de esos directores que tengo que rescatar, de momento el arranque ha sido inmejorable, Historias mínimas me ha encantado. Vamos a ver que nos ofrece en Donosti :) Un abrazo!
EliminarPequeña gran película. Hace tiempo que la vi, pero quizá le de otro visionado porque, la verdad, lo merece.
ResponderEliminarSaludos!
Hola Álvaro! Muy buena, hace de la sencillez y de la humildad su gran virtud. Saludos!
EliminarSoy muy fan de "Historias mínimas" y en general bastante entusiasta del cine de Sorín, pese a ciertos altibajos. "EL gato desaparec" que creo es su última película me encantó y las posteriores a "Historias mínimas" que pecaban de querer repitir el modelo, tenían su encanto (aunque menos). A ver que tal esta película de San Sebastián. En m hipotética lista, sería de mis favoritas. Un abrazo.
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