El tiempo pasa volando y ya hace prácticamente un año de la primera sesión de Phenomena. Para celebrar este primer aniversario, nada mejor que volver al primer programa doble con que se inició todo, un cartel de lujo formado por dos de las mejores películas de terror de todos los tiempos. Un terror provocado por monstruos tan lejanos que no nos encontraremos en la vida, pero que fueron capaces de aterrar de una forma que pocos han logrado repetir.
Para los que habéis asistido a alguno de sus pases no hace falta comentar nada más. Para los que todavía no lo habéis hecho, os animamos a ir, sabemos que nos lo agradeceréis. Os dejamos con el vídeo resumen de la temporada anterior.
¡Larga vida a Phenomena!
Para los que habéis asistido a alguno de sus pases no hace falta comentar nada más. Para los que todavía no lo habéis hecho, os animamos a ir, sabemos que nos lo agradeceréis. Os dejamos con el vídeo resumen de la temporada anterior.
¡Larga vida a Phenomena!
Tiburón de Steven Spielberg (1975)
¿Tú vas a estar en la jaula? ¿La jaula va a estar en el agua? ¿Tú vas a estar en el agua? Nuestro tiburón está en el agua
Un gran tiburón blanco es visualizado en la costa de Amity, un pueblecito turístico de Nueva Inglaterra. Para evitar pérdidas económicas, el alcalde se niega a difundir la noticia y a cerrar las playas. Una bañista será atacada en la misma playa, provocando el terror. Un veterano cazador de tiburones, un científico y el jefe de la policía local unirán sus fuerzas para cazarlo.
Spielberg vuelve a Phenomena de nuevo con una de las películas de terror más recordadas de todos los tiempos para demostrarnos que además de entretener si se lo propone también sabe aterrar. A través de una historia creíble, maneja el suspense con una habilidad increíble, jugando con los miedos de la platea a la que domina en todo momento. La película tiene dos partes claramente diferenciadas, una primera marcada por el suspense en la que no vemos al tiburón pero sabemos que está ahí, centrada en la vida del pueblo y una segunda de terror y aventura, donde el trio formado por Scheider, Shaw y Dreyfuss nos conducirán al épico final.
Uno de los aciertos de la película fue no mostrar al tiburón hasta pasada la primera hora de película, esto se debe en gran medida a los problemas que tuvieron con el tiburón mecánico, pero que Spielberg supo aprovechar para generar más angustia mostrando solo las piernas de los bañistas. Otra de las claves de la película es la banda sonora de John Williams. Según los rumores, cuando Spielberg lo visitó para oír el tema principal, lo miró extrañado y le dijo ¿Eso es todo...?. Pocas veces unos simples acordes han logrado provocar tanto miedo. Tiburón logró los Oscar a mejor BSO, montaje y sonido; el de película, por el que también competía, fue a parar a Alguien voló sobre el nido del cuco.
La escena en que Matt Hooper se sumerge en una jaula fue rodada con tiburones blancos reales, pero Dreyfuss fue substituido por un enano para que el tiburón pareciese mayor. Tiburón arrasó en las taquillas de todo el mundo, recaudando 471 millones (había costado 12) y se convirtió en el primer blockbuster de la historia, haciendo famoso a Spielberg. La tensión y angustia que transmite, la dirección modélica, su desarrollo dramático, el magnífico ritmo y el sentido del entretenimiento hacen de Tiburón una película imprescindible. ¿Apetece un bañito?
Spielberg vuelve a Phenomena de nuevo con una de las películas de terror más recordadas de todos los tiempos para demostrarnos que además de entretener si se lo propone también sabe aterrar. A través de una historia creíble, maneja el suspense con una habilidad increíble, jugando con los miedos de la platea a la que domina en todo momento. La película tiene dos partes claramente diferenciadas, una primera marcada por el suspense en la que no vemos al tiburón pero sabemos que está ahí, centrada en la vida del pueblo y una segunda de terror y aventura, donde el trio formado por Scheider, Shaw y Dreyfuss nos conducirán al épico final.
Uno de los aciertos de la película fue no mostrar al tiburón hasta pasada la primera hora de película, esto se debe en gran medida a los problemas que tuvieron con el tiburón mecánico, pero que Spielberg supo aprovechar para generar más angustia mostrando solo las piernas de los bañistas. Otra de las claves de la película es la banda sonora de John Williams. Según los rumores, cuando Spielberg lo visitó para oír el tema principal, lo miró extrañado y le dijo ¿Eso es todo...?. Pocas veces unos simples acordes han logrado provocar tanto miedo. Tiburón logró los Oscar a mejor BSO, montaje y sonido; el de película, por el que también competía, fue a parar a Alguien voló sobre el nido del cuco.
La escena en que Matt Hooper se sumerge en una jaula fue rodada con tiburones blancos reales, pero Dreyfuss fue substituido por un enano para que el tiburón pareciese mayor. Tiburón arrasó en las taquillas de todo el mundo, recaudando 471 millones (había costado 12) y se convirtió en el primer blockbuster de la historia, haciendo famoso a Spielberg. La tensión y angustia que transmite, la dirección modélica, su desarrollo dramático, el magnífico ritmo y el sentido del entretenimiento hacen de Tiburón una película imprescindible. ¿Apetece un bañito?
Alien, el octavo pasajero de Ridley Scott (1979)
- ¿Cómo lo matamos, Ash? Tiene que haber una manera. ¿Cómo lo hacemos?
- No podéis
- ¡Mentira!
- Aún no comprendéis a qué os enfrentáis, ¿verdad? Un organismo perfecto. Su perfección estructural sólo está igualada por su hostilidad
- Lo admiras
- Admiro su pureza. Un superviviente no limitado por la conciencia, los remordimientos ni ilusiones de moralidad
- Ya he oído bastante. Te ruego que lo desenchufes
- Aún no
- ¿Qué?
- No os puedo mentir sobre vuestras posibilidades, pero contáis con mi simpatía
Nostromo, una nave de carga, regresa a la Tierra cuando el ordenador central, MADRE, detecta una misteriosa transmisión procedente de un planeta cercano. La nave interrumpe su viaje y despierta a sus siete tripulantes para dirigirse al extraño planeta e investigar el origen de la comunicación.
Ridley Scott redefinió con Alien y Blade Runner las claves del cine de terror y ciencia ficción que han marcado estos dos géneros hasta nuestros días. Alien es la película perfecta, con un guión sin fisuras, unas imágenes que sumergen en una atmósfera claustrofóbica, un montaje perfecto capaz de provocar terror, un uso escaso de la música para que el silencio aterre más aún, unas interpretaciones magníficas y por encima de todo un diseño espectacular, desde los trajes de Moebius, hasta esa criatura terrorífica y espectacular creada por H. R. Giger, pasando por los magníficos FX de Carlo Rambaldi.
Una película censurada en países como USA, Inglaterra, Francia o España, donde la bestia mutante persigue a una Sigourney Weaver en bragas que suda terror por todos los poros de su piel, convertida en la teniente Ripley, la única que sabe como plantarle cara, mientras ve como sus compañeros mueren por sus defectos humanos frente a un enemigo que resulta invencible por su extrema inhumanidad. La escena en que nace el alien del pecho de Kane fue rodada bajo el más estricto secreto y los actores desconocían lo que iba a ocurrir, y esa fue la clave para lograr sus caras de terror y repulsión.
Como ocurre en Tiburón, el monstruo también tiene escasas apariciones, y llevó a su director a la cumbre. Alien es un film hermoso, tenebroso y aterrador, una obra maestra indiscutible del cine de terror y uno de los mayores hitos de la ciencia ficción en una misma película, atemporal e imprescindible.
Ridley Scott redefinió con Alien y Blade Runner las claves del cine de terror y ciencia ficción que han marcado estos dos géneros hasta nuestros días. Alien es la película perfecta, con un guión sin fisuras, unas imágenes que sumergen en una atmósfera claustrofóbica, un montaje perfecto capaz de provocar terror, un uso escaso de la música para que el silencio aterre más aún, unas interpretaciones magníficas y por encima de todo un diseño espectacular, desde los trajes de Moebius, hasta esa criatura terrorífica y espectacular creada por H. R. Giger, pasando por los magníficos FX de Carlo Rambaldi.
Una película censurada en países como USA, Inglaterra, Francia o España, donde la bestia mutante persigue a una Sigourney Weaver en bragas que suda terror por todos los poros de su piel, convertida en la teniente Ripley, la única que sabe como plantarle cara, mientras ve como sus compañeros mueren por sus defectos humanos frente a un enemigo que resulta invencible por su extrema inhumanidad. La escena en que nace el alien del pecho de Kane fue rodada bajo el más estricto secreto y los actores desconocían lo que iba a ocurrir, y esa fue la clave para lograr sus caras de terror y repulsión.
Como ocurre en Tiburón, el monstruo también tiene escasas apariciones, y llevó a su director a la cumbre. Alien es un film hermoso, tenebroso y aterrador, una obra maestra indiscutible del cine de terror y uno de los mayores hitos de la ciencia ficción en una misma película, atemporal e imprescindible.
Sorteamos una entrada doble gentileza de Phenomena.
Para participar en el concurso sólo tenéis que realizar dos sencillos pasos:
- Ser seguidor de Después de 1984 en Facebook
- Una vez en Facebook, contestar en la propia publicación del concurso a la pregunta:
¿Cuál es la película con la que más miedo has pasado?
Añade además tu nombre completo para poder recoger las entradas en caso de resultar ganador
Añade además tu nombre completo para poder recoger las entradas en caso de resultar ganador
Tienes tiempo hasta el jueves 15 de diciembre a las 23:00.
- Sólo se contabilizará un comentario por participante.
- El sorteo se realizará de forma aleatoria entre todos los participantes a través de la web sortea2.
¡Suerte a todos!
¡Nos vemos en Phenomena, esta vez con pastel de cumpleaños!
Y tanto que nos vemos, a Roswell le ha faltado tiempo para pillar las entradas jajaja
ResponderEliminarUn saludo ochentero!
Pues yo, que he ido poco pero he ido, confirmo que s una experiencia que mola y también animo a todos aquellos que no hayan asistido a dejarse caer. Espero volver prontito por ahí. Un abrazo.
ResponderEliminarUna gran iniciativa la de Phenomena. Como David espero volver pronto y disfrutar.
ResponderEliminarUn abrazo.
Dos emblemas del cine de los 70-80, dos clásicos contemporáneos, dos grandes películas que compatibilizaron a la perfección calidad y comercialidad. Un gran Spielberg y un enorme Scott.
ResponderEliminarSon tan buenas como populares.
Muy buena entrada, Smithee.
Qué pena que me pille lejos y que sean las sesiones en jueves, pero no descarto ir algún día a alguna sesión. Qué envidia me dais los que vais, copón!
ResponderEliminar¡Larga vida a esta idea tan cojonuda de Phenomena!
esta vez la sesión es en viernes! el 16 a las 8 de la tarde.
ResponderEliminarHola,
ResponderEliminarSidhe, no me extraña, es un pase brutal!
David, a ver si te dejas caer pronto y coincidimos
John, lo mismo que con David, a ver si coincidimos y nos vemos
Javier, como dices son dos pelis que supieron compatibilizar calidad y comercialidad, cosas que desgraciadamente no siempre van de la mano.
Jon, cuando empezó todas eran en jueves, pero poco a poco han ido desplazando la mayoría de sesiones a los viernes, así que es más asequible para la mayoría.
Anónimo, gracias por avisar a Jon
Un abrazo a todos!
Ah, qué bien! bueno no podré ir de todas formas pero para las próximas intentaré estar más al loro, gracias!!
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