Año: 2012
País: Austria
Director: Ulrich Seidl
Guión: Ulrich Seidl, Veronika Franz
Fotografía: Wolfgang Thaler, Edward Lachman
Montaje: Christof Schertenleib
Reparto: Maria Hofstatter, Nabil Saleh
Web: http://www.golem.es/paraiso/fe/
Seguimos con la trilogía de Ulrich Seidl. Le llega el turno a la segunda entrega, Paraíso: Fe. Aunque no es un hecho habitual, en esta ocasión ha habido división de gustos entre los miembros de DP1984. Por ello hemos querido hacer nuestro primer cara a cara a través de dos críticas, una negativa y una positiva. Un blanco - negro o más bien dicho un contraste Paraíso - Infierno.
¡Señor perdónalo! No sabe lo que está haciendo
Valoración: 4/10
Por Xavi Lezcano
Después del visionado de la segunda entrega de Paraíso puedo afirmar sin ninguna duda que Ulrich Seidl se ha situado en esa lista de directores capaces de ofrecerme una de cal y otra de arena. El autoproclamado "pornógrafo social" entra así a formar parte de un selecto de grupo de directores que incluye a algunos auténticos pornógrafos sociales, como el recientemente desaparecido Bigas Luna, que retratan de forma habitual la sordidez mediante visiones unas veces insuperables y otras insufribles. De todas maneras, el director austríaco se mantiene siempre en una zona templada, ya que de momento ninguna de sus obras me parece ni una master piece ni una infamia.
Si en Paraíso: Amor seguíamos las desventuras y fracasos de Teresa, depredadora sexual austriaca entrada en años y quilos, víctima del turismo sexual keniata, en esta segunda entrega de la trilogía, su hermana Anna Maria pondrá a prueba su fanatismo religioso. Tras sus escarceos sexuales en Kenia, Ulrich Seidl se decanta en esta ocasión por la religión, posiblemente el tema que levanta más ampollas con una simple referencia, algo que el austriaco no podía desaprovechar para tocar la moral de los mojigatos de turno.
Tal y como ya ocurría en la primera entrega, lo mejor de Paraíso: Fe es su protagonista, interpretada magistralmente por Maria Hofstätter, habitual de las cintas de Seidl. Su personaje podría ser perfectamente una continuación de los que interpretaba en Dog Days o Import/Export, que continúa encabezando mi top de su filmografía. De todas maneras, al margen de las destacadas interpretaciones, marca de la casa, y de un inicio prometedor, la película termina por caer en una especie de tedio, donde no solo se repite a sí misma y a otros títulos de su autor (otra constante del director) sino que además cae en territorios comunes de la crítica a la religión con escasas innovaciones.
Resulta una lástima que Seidl esté tan preocupado por escandalizar que pierda el norte, con orgías callejeras que nos alejan del realismo previo, gatos duplicados (o desaparecidos) y peleas con rusas prácticamente autoplagiadas. Todo ello hace que lo que podría ser un retrato certero y corrosivo sobre la religiosidad extrema termine convirtiéndose en una historia sobre una loca despechada que se agarra a la religión como tabla de salvación. En definitiva, Paraíso: Fe intenta mostrarnos la fe como substituto de la felicidad pero nos demuestra que el escándalo no es un substituto digno de las ideas.
Lo mejor: Maria Hofstätter
Lo peor: El intento constante de molestar
Es el diablo el que quiere la cerveza, no tú. ¡Tú no la quieres!
Valoración: 8/10
Por Josepe Machado
"Hay muchas personas obsesionadas con el sexo. Libéralas de su infierno y libéralas de su lascivia Señor." Con estas palabras empieza la penitencia de Anna Maria, un castigo auto impuesto en busca de una redención en nombre de toda la humanidad, un sacrificio para paliar el pecado de la incontinencia sexual. He aquí el acertado nexo de unión entre la primera y la segunda entrega de la trilogía Paraíso. Mientras Teresa vive su agitada travesía en busca del amor en Kenia, su hermana Anna Maria disfruta de sus vacaciones en Austria, en busca de nuevos feligreses en Paraíso: Fe. Todo por volver a ser una Austria católica. ¿Acaso la Fe no es la manifestación más hermosa del Amor?
Maria Hofstatter le toma el relevo a Margarete Tiesel sin decepcionar, ofreciendo de nuevo una interpretación impecable muy acorde con el universo Seidl y con el elevado listón que dejó la aclamada protagonista de Paraíso: Amor. Su personaje evangelizador bien podría ser una evolución de aquella autoestopista que increpaba a los conductores con sus extravagantes estadísticas, interpretada por ella misma en Dog days. Tampoco cuesta mucho imaginarse a Anna Maria como la enfermera resentida y envidiosa a la que Hofstatter dio vida en Import/Export. Es así como esta actriz austríaca se consagra como una de las constantes del cine de Seidl desde una vertiente dual: en presencia y personaje.
Tras unas vacaciones en Kenia, Ulrich Seidl vuelve a su querida Austria, su escenario habitual. En esta segunda entrega, el humor negro termina por apoderarse de la historia debido a la extrema enajenación de su personaje. ¿Crítica a la religión? No la encontré, excepto quizás en la visita inicial con el matrimonio de divorciados que razonan con cordura. Quitando esa escena y aunque el trasfondo religioso es omnipresente durante toda la película, Paraíso: Fe nos habla de las obsesiones a través de una persona que ha perdido el rumbo. Anna Maria se acoge a la religión como su única salvación y lo da todo con una persistencia de acero. Mientras que Teresa quería llenar su vida con amor en la primera entrega, Anna Maria no sabe con qué colmar la suya, y la fe será el vehículo que la llevará en busca de ese destino desconocido o más bien inexistente.
Una vez más el estilo Seidl se hace patente, mucho más que en Paraíso: Amor. El retorno a Austria es como un retorno al Seidl más radical, al de Dog days. Volvemos a la Europa más rancia y descompuesta. La extravagancia se apodera de la realidad en forma de escenas muy pasadas de vueltas, personajes sin rumbo y sus repeticiones. Estamos ante el Seidl mas auténtico que cautivó a muchos de sus fans en su día y que salió victorioso con el Premio Especial del Jurado en la Mostra de Venecia. Teresa no encontró el amor en Paraiso: Amor y parece que la Fe no le ha servido a Anna Maria para poder darle algún sentido a su vida. Solo nos queda esperar con Esperanza.
Lo mejor: Maria Hofstätter
Lo peor: No tomársela con sentido del humor
Bueno, pues yo le doy un seis, y para que veáis que no es una decisión salomónica de ahora lo documento con una entrada de hace ya unos meses...
ResponderEliminarhttp://maraminiver.blogspot.com.es/2012/11/seff12-ultima-tanda-y-palmares.html
A mí me gusta más el paraíso amoroso ;)
Un abrazo
Buenas! Yo también me quedo con el amoroso parte 1. A ver que tal el amoroso parte 2
ResponderEliminarMe paso y te leo, que suelo esquivar cosas que no he visto y no te leí en su día
Un beso!
ResponderEliminarEmpezaré con Paraíso amor que no la he visto aún. Muy buena entrada con todos sus pros y sus contras. Una alegría volver a pasarme por aquí, Xavi y Josepe. Un abrazo
Pues sí, empieza por la primera. Como siempre un placer leerte Javi!! :D
EliminarUn abrazo de los dos!
Otra basura más en el arte para insultar a la religión católica. Ulrich Seidl, el genio provocador autor de joyas como Import-Export no ha tenido lo que hay que tener para atreverse a meterse con el Islam cundo lo tenía a huevo: solo un poquito cuando el marido musulmán grita que todas las mujeres en Austria son unas putas, que es lo que verdaderamente piensan los musulmanes de la mujer europea.
ResponderEliminarLa escena cumbre de la pretendida provocación que no escandalizará a nadie por repetitiva es la masturbación con el crucifijo (Seidl el provocador copiando a Madonna, qué triste).
Mal guión, tirando a aburrida, cómoda para el autor y poco novedosa en el tema elegido repetido hasta la náusea (¿alguien se cree que los cristianos son así?) no le llega a la suela de los zapatos a Paraíso Amor, ni a Canícula - Días perros protagonizada por la magnífica actriz Maria Hofstätter haciendo de deficiente.
¿Por qué no elegir a los evangelistas por ejemplo? Ese hubiera sido un guión más actual y original. ¿Por qué repetir el tema de la inmigración con la rusita bella que ya aparece en otro personaje de Import-Export?
¿Se está quedadno sin ideas el antiguo documentarista?
Pues ahí queda otro punto de vista más. Como ya he expuesto para mi no es una crítica a la religión, pero como ves hasta los dos miembros de este blog no nos ponemos de acuerdo. Como siempre que se habla de Seidl también añadiré que ninguna escena de la película me escandalizó, sin embargo tengo que reconocer que me reí mucho.
EliminarUn saludo!
Hombre, Seidl es especialista en criticar nuestra sociedad en cualquiera de sus aspectos y sobre todo le interesa la pequeña burguesía. En Paraíso Amor, aparte de adentrarse en criticar la sexualidad femenina y su "masculinización", el tema es el turismo sexual. En Fe es la religión, no solo cómo se la tome alguien sino de alguna manera generalizando el fanatismo, como si fuera tan fácil que una técnico sanitaria sufriera una transformación mental que la convirtiera en puritana de repente. Y no se por qué eligió ese tema porque hoy día precisamente la tendencia es la falta de fe. Para mí es un patinazo.
EliminarAy ay, debate a la vista xD... Y yo aquí con ganas de ver en qué lado me sitúo. De momento Paraiso: amor ha sido una película que me ha gustado a medias, como bien sabéis, pero las otras dos me interesan aún más por lo que cuentan.
ResponderEliminarYa os contaré.
Un abrazo!
Bueno, ya sabes que siempre que aparece Ulrich Seidl hay encuentro de opiniones. Esta segunda entrega es más radical que la primera, hay que tomársela con bastante humor negro, Ya dirás ;)
EliminarUn abrazo!
Pues llego por aquí tarde pero sin haber visto aún la peli, ja,ja. Tenía pensado hacerlo en muy breve, aunque el aburrimiento supino que he sufrido con Dog Days me ha enfriado bastante y tras leerte, Josep, que ésta se parece a aquélla, buf, qué bajón, porque yo aún no sé que pensar de este director, ya que llevo una que me encanta, una que ni fu ni fa y otra que detesto. En fin, veremos y viva la discrepancia.
ResponderEliminarUn abrazo.
Dog Days es bastante buena, además tiene humor: cómo retrata a los jubilados tocapelotas, los canis de coches tuneados, la medio retrasada que interpreta increíblemente María Hofsttater es muy divertida también metiéndole el dedo en el ojo a los que la llevan en sus coches, los separados tienen miga... Me gustó bastante.
EliminarDavid, yo creo que si no eres fan del humor de Dog days, poco te va a gustar Paraíso: Fe, pero obviamente eso solo lo puedes averiguar viéndola xD Ya dirás!
EliminarUn abrazo!